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Día 65
Lo malo de vivir en una aldea muy poblada son los Gólem. Si bien están para proteger a los aldeanos, hay veces en que se les pasa la mano.Si ninguna mala intención, pasé a llevar a un aldeano. Fue algo sin importancia, pero eso bastó para que el grandotote de hierro comenzara a perseguirme por todas partes, sin despegar sus feos ojos de mí. No me dejaba ni un segundo tranquila, siempre amenazándome.
Hasta que se hizo de noche y una fuerte tormenta eléctrica cayó sobre la aldea. Yo me fui a refugiar y el Gólem a la siga mía. Pero al día siguiente, junto con amanecer totalmente despejado, no había señas del Gólem por ninguna parte.
Y desde entonces nunca más lo volví a ver.
Pkiblue
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